Desde hoy, y durante toda la semana que viene el blog adquirirá una dinámica distinta. Bueno yo puse las reglas y puedo cambiarlas ¿no?. Hoy comienza, para la religión católica (y para otras variantes cristianas) la semana santa, así que durante esta semana no se publicarán poemas, sino imagenes relacionadas con Jesús.
Jesús ese personaje extraño del que no se sabe con presición si realmente existió, es quizá el hombre más influyente de la historia y, por lo tanto también es fundamental en el arte; desde el arte paleocristiano hasta la actualidad se ha representado de todas las formas posibles (pensemos por ejemplo en las piezas de Salvador Dalí, Andrés Serrano, Damien Hirst, Chris Ofilli sólo para mencionar algunos contemporáneos) por lo que en este blog le dedicarémos una semana entera; mostrando obras tanto clásicas como contemporáneas, críticas, irónicas o ya completamente blasfemas a salud de el Cristo, buscando con esto no sólo blasfemar o sacralizar sino motivar la reflexión sobre la actualidad del pensamiento cristiano, sus luces y sus miserias vistas desde el mundo del arte; pues siguiendo el rastro de como se representa al cristo, podemos seguir también el rastro del desarrollo de la civilización occidental; de su origen griego mitológico hasta la postpostmodernidad caótica de un mundo globalizado, riesgoso nihilista y hedonista.
Hoy es "Viernes de dolores", en algunos sitios se considera que hoy comienza la semana santa. Hoy se recuerda el sufrimiento de la virgen María durante la semana santa; en algunas zonas incluso es día de ayuno en memoría de su sacrificio a pesar de que en el Concilio Vaticano segundo suprimieron esta festividad (intentando terminar con siglos de tradición, la cual tiene su origen en el siglo XIII cuando se instituyó el viernes de dolores por la Orden de los Siervos de María).
Para recordar la figura de la Virgen desde una perspectiva contemporánea, hemos decido elegír la pieza "The Holy Virgin Mary" del artísta brítanico de ascendencia africana Chris Ofili ganador del premio Turner. La pieza, que representa a una virgen negra (pintada con excremento de elefante) rodeada de recortes pornograficos que asemejan angelitos ¿o moscas,? se hizo famosa cuando el alcalde de New York Rudolf Giuliani la censuró en 1999 argumentando blasfémia e incluso amenazó a los directores del museo en el que se exhibía, no logrando su cometido, por supuesto sin al contrario, logrando que muchísima gente hiciera enormes filas para ver la pieza. Pero ¡alto ahí! la obra de Ofili es mucho más delicada y compleja de lo que podría parecer en primero momento; él es un fervoroso católico romano de origen nigeriano, en dónde el excremento de elefante tiene un profundo simbolismo; el usarlo en los senos de la virgen es simbólo de fertilidad, en cuanto a su forma Ofili crea una nueva figura de la virgen en protesta dcontra la sexualización y la estigmatización de género que ha sufrido la figura de la virgen a lo largo de los siglos (venga, que la ponían muy buena y sumisa), por lo que crea una imagen más espiritual, menos carnal de la virgen.
El New York Times le preguntó a Ofili qué pensaba de las críticas que le llovían a su obra (comunidades católicas se reunían a rezar a las afueras del museo y tachaban al artista de blasfémo) y Chris respondió: "No siento que tenga que defender la obra. La gente que ataca la pintura está atacando su propia interpretación, no la mía".
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